Los vecinos de la Plaza Porticada llevan mucho tiempo quejándose por el mantenimiento que se hace de esta zona del pueblo. La limpieza deja mucho que desear y los problemas del alumbrado se han producido a lo largo de todo el verano. El tema del alumbrado, que deja media plaza sin iluminación, es un acicate para que por las noches se monten botellones u otros problemas de orden público.
La fuente de la plaza es otro ejemplo del desinterés municipal, ya que lleva mucho tiempo sin funcionar. Ahora han colocado unas vallas que incrementan todavía más la sensación de dejadez.
Esta zona podría ser una de las más bonitas de nuestro pueblo si no fuese porque no se tiene el cuidado debido desde el Ayuntamiento. Esperemos que nuestros gobernantes se den cuenta de ello algún día.
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